La mayoría de la gente desea mantener una piel joven y luminosa. Esto no es fácil debido a que la edad de la piel refleja el exceso de exposición al sol y la disminución de la producción de colágeno.
Este programa de reducción de arrugas tiene unos resultados espectaculares y utiliza la luz para producir una reacción fotoquímica con efectos terapéuticos. Los resultados son visibles en tan solo un mes. Combinando la tecnología de Luz Pulsada Intensa (IPL) con un revolucionario fotosensibilizador el tratamiento, además de disminuir las arrugas, también mejora la textura de la piel y las finas líneas de expresión.
Es un innovador tratamiento que intensifica los tratamientos de luz pulsada, aumentando la producción de colágeno y mejorando la textura y el aspecto de la piel.
La novedad consiste en aplicar un producto fotosensibilizador de la piel, levulínico encapsulado en un liposoma, que tiene una rápida y profunda penetración en la piel.
Una vez la piel absorbe el fotosensibilizador el principio activo de la fórmula se convierte en protoprphyrin IX (PpIX). Cuando este se activa por la longitud de onda apropiada, la reacción del cytotoxic empieza en las células de la piel tratadas. Esto genera la respuesta de la renovación celular y estimula la producción local de colágeno. Exteriormente el resultado de esta combinación es el relleno de las arrugas faciales.
Primeramente se aplica en la piel cada 5 minutos durante 1 hora el fotosensibilizador. Este spray hace que su piel sea más receptiva a la luz.
A continuación se aplica en la cara un gel transparente basado en agua (similar al usado en tratamientos de ultrasonido) y el médico guía la luz visible desde la lámpara de destellos a la piel tratando la zona 3 veces.
La terapia fotodinámica con fotosensibilizador es adecuada para hacer el tratamiento durante todo el año en pieles ligeramente bronceadas e incluso en fototipos de pieles oscuras.
La luz que emite la lámpara de destellos proporciona una unificación del tono debido a la eliminación de alteraciones pigmentarias, manchas y rojeces difusas causadas por la edad. También mejora la textura de la piel aportando luminosidad y tersura. Los tratamientos faciales son los más comunes pero puede tratarse cualquier parte del cuerpo.