Este artículo ha sido corregido y revisado por el Doctor Jaime Piquero
Con el aumento de temperaturas y la llegada del verano a la vuelta de la esquina, es posible que empieces a preguntarte: ¿Por qué sudo tanto sin hacer nada?
La sudoración es un proceso fisiológico gracias al cual nuestro organismo logra mantener una temperatura corporal óptima para su buen funcionamiento, por lo que es normal sudar a causa del calor, el ejercicio físico o en situaciones de tensión. No obstante, si sudas de manera excesiva y/o sin una causa clara, podrías padecer de hiperhidrosis.
La hiperhidrosis (también erróneamente conocida como “hiperdrosis”) es el fenómeno de sudoración excesiva en determinadas zonas del cuerpo, más comúnmente en las palmas de las manos (hiperhidrosis palmar) y en las axilas (hiperhidrosis axilar), a causa de un incremento en la secreción de las glándulas sudoríparas. Esto es resultado de la hiperactividad de estas glándulas en respuesta a una sobreestimulación nerviosa (estrés, tensión emocional, ansiedad…), el efecto de un fármaco o un aumento de temperatura, entre otras causas.
Esta afección dermatológica tiene incidencia en el 3% de la población, y afecta a ambos sexos por igual.
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Los síntomas de la hiperhidrosis suelen ser los siguientes:
Las causas de hiperhidrosis suelen deberse principalmente a estímulos térmicos (aumento de temperatura) y emocionales (ansiedad, estrés, nerviosismo…), que desencadenan la respuesta de las glándulas sudoríparas.
Por otro lado, la hiperhidrosis también puede deberse a algunas condiciones como el embarazo, la menopausia y la obesidad; así como un efecto secundario de algunos tratamientos farmacológicos o síntoma de diversas enfermedades y afecciones metabólicas (diabetes, disfunciones de la tiroides, alteraciones en la glándula suprarrenal, infecciones o trastornos del sistema nervioso…). Por ello, en caso de empezar a experimentar episodios de sudoración excesiva de manera espontánea y sin causa aparente, es importante acudir a un especialista médico para poder hacer un diagnóstico correcto y descartar posibles causas patológicas.
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En clínicas Dermik seguimos un tratamiento para la hiperhidrosis a base de la toxina botulínica (Botox®). El objetivo del tratamiento es reducir el exceso de sudoración en zonas localizadas del cuerpo, como las axilas o las palmas de manos.
La técnica consiste en la administración de esta toxina en la zona a tratar de manera subcutánea, lo que bloquea la conducción nerviosa, reduciendo así la actividad de músculos y glándulas sudoríparas. El procedimiento se realiza habitualmente con anestesia local por refrigeración de la zona o anestesia tópica.
El tratamiento a base de la toxina botulínica es especialmente adecuado para los siguientes tipos de hiperhidrosis:
Gracias al tratamiento a base de la toxina botulínica, se observa una disminución progresiva de la cantidad de sudor en la zona tratada al cabo de 1-2 semanas.
La duración de los efectos del tratamiento es variable, oscilando habitualmente entre los 6-8 meses. Una vez pasado este tiempo, se puede repetir el tratamiento tantas veces como sea necesario.
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profesionales médicos expertos.
Dr. Jaime Piquero
Dermatología General y EstéticaEl Dr. Jaime Piquero es especialista en dermatología general y estética en la clínica dermatológica Dermik. Recibió el título de Licenciado en Medicina en 1998 por la Universidad Central de Venezuela y de especialista en Dermatología y Venereología en el 2002 por la Universidad de São Paulo, Brasil. Además de realizar un Máster en Ciencias por la Universidad de São Paulo, Brasil del 2002-2004.
Fecha de última revisión: 27 de abril, 2023
Fuentes.